Mikel Gil Sojo
Luis y su hijo Loïk,
de nueve años, mantendrán su vivienda al menos hasta el próximo 3 de diciembre,
gracias a la colaboración de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Una
veintena de miembros de la organización se han presentado a las once y
media de la mañana ante la puerta de la vivienda para frenar, con éxito, a las
autoridades enviadas por Caixa Tarragona y reclamar los derechos fundamentales
que un ciudadano debe tener.
«El estado español es
el único en el que todo el peso de la crisis cae en las familias trabajadoras»,
ha declarado una de las personas de la plataforma desplazadas al lugar, al
tiempo que destacaba que hay mucha gente que pierde la casa y se queda con la
deuda inicial. En el caso de Luis, «no solo le echan de casa sino que reclaman
100.000 €».
Tras la llegada de
los miembros del juzgado enviados por la entidad bancaria, el personal de la
PAH ha pedido a la policía local que se mantuviese en el rellano. Una mujer del
movimiento antidesahucios se ha dirigido a un agente: «La revolución empieza
con personas como usted que dicen que no». Esta es, según ella, la revolución
pacífica de las personas que ayudan a ciudadanos con problemas graves.
Después de que la
letrada informase al deudor de que, firmase o no los documentos, se procederá
al desalojo pasado un mes. Al no haber firma, los miembros del juzgado han
escuchado las reivindicaciones de la plataforma antes de marchar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario